• info@whip.mx
  • (33) 3630.2942

En la actualidad, se considera al mentoring empresarial como una de las principales estrategias para el desarrollo y progresión profesional del talento. Tomando esto en cuenta, cada vez más organizaciones deciden sumar esta clase de programas para aplicar en sus equipos. 

Pero, ¿cómo funciona el mentoring en las empresas? ¿Cuáles son los beneficios de la mentoría para tus colaboradores? y ¿cómo crear un programa de mentoring empresarial? ¡En este artículo te hablaremos de todo eso y mucho más! Quédate hasta el final porque además te contaremos cómo llevar adelante la gestión de la formación con Factorial


¿Qué es el mentoring empresarial? + Ejemplos 

Para definir qué es el mentoring podemos decir que se trata de una relación profesional. En esta, un mentor se encarga de guiar a una persona para que pueda desarrollar habilidades y conocimientos en una determinada área. El objetivo es que el aprendiz pueda mejorar su carrera profesional y personal. 

Básicamente, se trata de un proceso de conversación entre dos o más personas, donde una de ellas es un experto con experiencia y conocimientos en un tema o área específica y en cada encuentro comparte lo que sabe con sus mentorizados. Siempre en función de lo que los aprendices quieran mejorar o trabajar. 

Esto convierte al mentoring en un proceso personalizado, donde la finalidad es la mejora continua de los mentorizados, gracias a la guía del mentor

Por ejemplo, imagina una conversación entre tus trabajadores con un experto. Este acumula experiencia en él área en la que ellos trabajan. Es un profesional con sabiduría en ese rubro, no solo por que se ha formado y especializado en ello, sino porque acumula cientos de horas de trabajo en ese sector.

Ese intercambio se produce de forma sistemática y genera mejoras contundentes en la forma en que tus colaboradores llevan adelante su labor.  Eso, a grandes rasgos, es el mentoring.


Y, si nos enfocamos específicamente en la definición de mentoring empresarial encontramos el mismo concepto, solo que aplicado como proceso dentro de las organizaciones. Es decir, que puedes crear un programa de mentoring empresarial adaptado a las necesidades específicas de tu compañía y las personas que trabajan dentro de ella.

Así, este tipo de mentoring se enfoca no solo en motivar y capacitar a tu fuerza laboral, sino además en adecuar este proceso a los objetivos de la empresa.

👉 Conoce la diferencia entre el coaching y el mentoring


¿Cómo funciona el mentoring empresarial?

Como podemos ver hasta aquí el mentoring empresarial consiste en la transferencia de conocimientos que puede hacer un mentor para acelerar el proceso de aprendizaje de los mentorizados. En el caso concreto de las organizaciones, estos serían los empleados.

En este sentido, el mentoring empresarial está centrado en el “cómo”. Es decir, en la forma adecuada de hacer las cosas dentro del rol asignado a cada trabajador. Por ello, es un proceso personalizado, ya que esto implica que el mentor trabajará aspectos particulares con cada trabajador. Así sea que este proceso se desarrolle de forma grupal. 


Como es sabido, cada colaborador tiene objetivos particulares que abordar debido al puesto que ocupa dentro del organigrama de la empresa. Así, un proceso de mentoring empresarial no puede abordar las mismas soluciones para todos por igual, ya que cada empleado tiene metas y necesidades específicas que trabajar. 

En este punto radica el principal valor del mentoring empresarial, dado que se centra en abordar cómo hacer el trabajo para desarrollarse profesionalmente, crecer dentro de la empresa y mejorar cada día un poco más. 


Así, el mentoring empresarial funciona como un proceso de capacitación laboral para la mejora continua en las organizaciones

El funcionamiento del mentoring empresarial reúne las siguientes caracteristicas:


Mediano y largo plazo

La clave del mentoring en las empresas es funcionar como un proceso  de mejora continua. Para ello, es importante sostenerlo a través del tiempo. De esta manera, para aprovechar al máximo los beneficios del mentoring empresarial, por lo general, este suele ser de mediano a largo plazo

Esto también se debe a que, como ya mencionamos, la metodología es, básicamente, una relación profesional entre mentor y aprendiz. Como todo vínculo, se necesita tiempo para su consolidación. 


Centrado en lo vincular

Como dijimos antes, el mentoring consiste en una relación profesional entre mentor y mentorizado. Por eso, es un proceso que está orientado en construir un vínculo entre ambas partes. Precisamente, es gracias a esta relación que el aprendiz logra los objetivos establecidos en el programa de mentoría.


Bidireccional

Otros de los aspectos que caracteriza el funcionamiento del mentoring empresarial es que se trata de un un proceso bidireccional. Esto implica que tanto el mentor como el aprendiz llevan adelante las sesiones. 

Recordemos que estos encuentros se desarrollan a modo de conversaciones entre dos o más personas. En cada uno de ellos el aprendiz cuenta cuáles fueron sus avances y el mentor lo orienta para que reflexione sobre lo que puede mejorar. Pero también, el mentorizado puede plantear dudas o aspectos que quiera desarrollar y buscar al mentor para que lo guíe hacia ese objetivo. 


Brinda orientación y asesoramiento

Para entender cómo funciona el mentoring en las empresas es clave saber qué rol ocupa el mentor. Su tarea consiste en escuchar lo que cada colaborador necesita, las dudas o problemas que enfrente al desarrollar su labor y también los objetivos que tenga

Lo siguiente implica entender en qué situación se encuentra el talento, para poder abordar, en función de ello, un plan a seguir con el asesoramiento del mentor. Así, el rol de este profesional es orientar a los aprendices en la dirección correcta, para que alcancen sus metas y se desarrollen tanto en lo profesional, como en lo personal. 


Sin dudas, el mentoring empresarial es una de las apuestas por humanizar las empresas. En tanto, los desafíos que afronta el personal se abordan desde un lugar más cercano y personalizado. De esta forma, las organizaciones pueden acompañar de manera más efectiva a su fuerza laboral


La experiencia como guía 

Si hay algo que caracteriza el trabajo del mentoring en comparación con otro tipo de procesos de formación y desarrollo es que el primero se basa en la experiencia personal y profesional del mentor


Por ello, al crear un programa de mentoring empresarial es fundamental incorporar mentores que estén experimentados en su campo. Dado que este profesional utiliza su trayectoria para brindar asesoramiento y guiar a los aprendices. 


Es decir que el mentor debe ser alguien que ya estuvo en el mismo lugar que su mentorizado. Una persona que se ha enfrentado a los mismos desafíos y pudo encontrar la forma de alcanzar el éxito en esa área. 


¿Cómo crear un programa de mentoring en tu empresa?

En los párrafos anteriores comenzamos a delimitar de alguna manera qué aspectos debes tener en cuenta al momento de crear un programa de mentoring empresarial. Sin embargo, para profundizar en esto, te compartimos el paso a paso imprescindible para establecer este proceso en tu compañía.


1-Planificación 

Esta primera etapa de la creación de un programa de mentoring empresarial consiste en sentar las bases de esta formación. Lo que nos lleva a establecer los objetivos de tu programa de mentoring

Como siempre, cuando se trata de definir metas para un nuevo proceso en las empresas la clave está en indagar sobre las necesidades existentes en tu organización. ¿Qué es lo que necesita actualmente tu equipo para desarrollarse y crecer de manera óptima en tu compañía? 

Por lo general, los objetivos que se marcan en un programa de mentoring empresarial buscan resolver problemas existentes. Además, estos objetivos deben ser específicos, para poder medir la efectividad del programa a medida que se implementa.

Para ello, puede ser útil incorporar una herramienta que te permita hacer seguimiento de objetivos. Con un software especializado puedes crear distintos tipos de metas para cada trabajador de tu empresa y personalizar el seguimiento para tener una dimensión real del impacto del programa de mentoring en el talento de tu organización. 

👉 Con el software de Factorial, puedes utilizar Objetivos y Resultados Clave (OKR) e Indicadores Clave de Desempeño (KPI) para gestionar los objetivos de tus colaboradores y con ello mejorar el proceso de mentoring en tu empresa. ¡Descubre cómo funciona esta herramienta!


2- Identificar mentores y mentorizados 

El segundo paso para crear un programa de mentoring empresarial consiste en identificar qué miembros de tu equipo pueden cumplir el rol de mentor y para quiénes estaría destinada la mentoría

Para elegir mentor puedes optar por abrir una convocatoria para que los interesados participen. También otra alternativa es proponérselo a aquellos profesionales dentro de tu equipo que cumplan con los requisitos esenciales tales como experiencia en el área en la que se enfoque el programa de mentoría, conocimientos, resultados probados y, por supuesto, predisposición o deseo de asumir ese rol. 

En el caso de los mentorizados puedes utilizar la información obtenida de las evaluaciones de desempeño para identificar cuáles son las personas que necesitan este proceso. 


Otra opción es estructurar varios programas de mentoría para distintas etapas del ciclo de vida de cada empleado. Así, puedes crear programas que se dirijan de forma directa a ciertos grupos específicos tales como:

  • Nuevos empleados. Algo muy común en el proceso de onboarding es asignar a las nuevas contrataciones un mentor para que los introduzca a la empresa y sus tareas. 
  • Trabajadores en ascenso. Si un colaborador va a cambiar de puesto y asumir una posición de liderazgo esta puede ser una instancia clave para que reciba conocimientos de alguien más experimentado. 

3- Emparejar mentores y mentorizados 

Otro paso clave al crear un programa de mentoring empresarial consiste en realizar el emparejamiento adecuado entre mentores y mentorizados. Es importante tener en cuenta que no existe una fórmula universal que pueda aplicarse a todos los casos. Sino que debe analizarse cada situación en particular. 

Esto va a depender de los objetivos de:

  • Cada área o departamento dentro de la empresa.
  • Las necesidades puntuales del personal.
  • Los objetivos que persigue la compañía. 

La clave está en encontrar la mejor asociación posible entre un mentor y los aprendices. De esta forma, solo así se podrá lograr el desarrollo esperado en el talento. 


4- Definir el contexto del programa 

La tarea en este punto consiste en definir el marco de trabajo entre el mentor y mentorizado. ¿Qué quiere decir esto? Básicamente, qué tipo de programa se llevará a cabo y cómo se desarrollarán las sesiones.

En principio, los tipos más comunes de mentorías son:

  • Mentoring 1 a 1. Este es el modelo tradicional de mentoring empresarial donde el mentor y un empleado mantienen una relación a largo plazo. Consiste en reuniones 1 a 1 en las que el primero transmite conocimientos y habilidades al segundo. 
  • Entre pares. En este modelo de mentoring empresarial varios profesionales del mismo rango de experiencia y conocimientos comparten sus ideas. Se trata de reuniones en grupos reducidos. 
  • Mentoring de equipo. Este tipo de programa de mentoring empresarial está dirigido a equipos de trabajo o departamentos  de una empresa. Por lo general, se trabajan objetivos grupales y el mentor guía al equipo para alcanzarlos. 
  • Exprés. Este tipo de mentoría no está pensando en el largo plazo, sino en proveer  conocimiento específico, sobre ciertos temas, en un periodo corto de tiempo. Suelen ser mentorías que se imparten en congresos o jornadas de trabajo puntuales. 

Una vez definido el tipo de programa a implementar se deben trazar los aspectos logísticos del proceso. Esto es:

  • Periodicidad de las reuniones.
  • Lugar donde se celebrarán.
  • Formato de cada encuentro.
  • Cómo se procederá en caso de cambio de horario o fechas.

Además, previo a iniciar el proceso de mentoring empresarial es importante que se expongan las expectativas del programa. Para que cada parte sepa lo que se espera de ellos. 


5- Darle seguimiento 

Finalmente, una vez implementado el programa de mentoring con los lineamientos que estableciste en los pasos anteriores, lo que sigue es darle seguimiento. La tarea implica medir el nivel de satisfacción de los implicados en el programa. Así como revisar los resultados que se van alcanzando de acuerdo a los indicadores establecidos en un primer momento. 

De esta forma, se debe revisar el grado de progreso en lo acordado en cada reunión, sumado a las acciones específicas que se establecieron en el plan para cada mentorizado.

Más allá del seguimiento individual, también es importante revisar la totalidad del programa. Gracias a ello podrás identificar las incidencias que se vayan presentando y las nuevas necesidades que aparezcan a medida que se trabaja. Por ejemplo, puede pasar que los mentores requieran algún tipo de herramienta para gestionar mejor cada proceso. 


¿Cuáles son los beneficios de la mentoría para tus colaboradores? 

Para hablar de los beneficios de la mentoría para tus colaboradores debemos comenzar enfocándonos en la finalidad con la que nació esta metodología. La filosofía detrás de este sistema sostiene que el potencial profesional de todas las personas suele estar sin explotar o desarrollar. Debido a ello se requiere la figura de un experto que guíe a cada individuo a potenciar sus conocimientos y talento a partir de los suyos propios.

Así, el mentoring empresarial puede generar múltiples beneficios a nivel grupal e individual dentro de las organizaciones. Algunos de los principales son:

  • Aumento de la productividad. Gracias al apoyo profesional que recibe, el mentorizado puede desempeñar sus funciones con más confianza y seguridad y acelerar el aprendizaje, lo cual mejora su productividad laboral.
  • Mayor motivación. El proceso de mentoring se caracteriza por el feedback continuo. Esta retroalimentación representa un reconocimiento a la labor de cada mentorizado, lo que influye positivamente en su motivación y desempeño.
  • Desarrollo del talento. Una de las tareas del mentor es detectar los rasgos más fuertes y más débiles del aprendiz al que está guiando. Así, su labor consiste en gran medida en acompañar al mentorizado a potenciar sus cualidades y desarrollar aquellas competencias que aún no domina.  
  • Retención de empleados. De acuerdo con una encuesta de LinkedIn el 94% de los trabajadores están dispuestos a permanecer más tiempo en una empresa si su empleador ofrece más oportunidades de aprendizaje y desarrollo profesional. Sin duda, las empresas que invierten en sus colaboradores tienen más probabilidades de conseguir que se queden. El mentoring es entonces una excelente estrategia de retención de talento. 

Gestión de la formación con Factorial

No hay dudas de que el mentoring empresarial es una excelente estrategia para aumentar la satisfacción del talento, mejorar su desempeño y con ello, conseguir mejores resultados por parte de la fuerza laboral. 

Ahora bien, el mentoring en sí mismo es una de las tantas alternativas de formación para tu personal. Si ofreces varios programas de capacitación es imprescindible sumar una herramienta que te permita gestionarlas de manera eficiente.

Con el software de Factorial puedes hacer el seguimiento de las capacitaciones, competencias y evaluaciones de tus empleados de manera práctica y sencilla. La herramienta te permite:

  • Crear tu propio sistema de gestión del aprendizaje.
  • Hacer un seguimiento detallado de tus proyectos de formación.
  • Monitorizar el avance de las competencias de tus empleados. 
  • Llevar a cabo reuniones one to one de manera óptima. 

Así, la gestión de la formación con Factorial te ayuda a centralizar en un único lugar todas las capacitaciones que realizan tus empleados, el nivel de progreso que alcanzan y las competencias y habilidades que adquieren. Con ello, puedes identificar mejor las brechas de aprendizaje que hay en tu empresa y crear programas formativos acordes a las necesidades de tu equipo.